martes, 15 de septiembre de 2009

Denigrante, si denigrante es ver lo superfluo que puede llegar a ser el mundo,
Lleno de mentiras y promesas rotas,
Donde los sueños se han vuelto insostenibles,
y la resignación es el canto de lucha del mundo.
¿Acaso nos volvimos ciegos?,
Seguimos viendo promesas rotas, sueños rotos, esperanzas rotas.
Esperanza, palabra la cual deberiamos ver como realidad,
Pero ahora nisiquiera eso, NO EXISTE
Solo vemos como pasan horas, segundos y minutos
Donde el tiempo y el trabajo nos domina, en vez de nosotros dominarlos,
¿que más podemos esperar?
En un mundo en el cual empezamos a creer en partidos, en ideologías, cerrados a creer en momento en personas.
Dentengamos un minuto a contemplar esta sociedad incapaz de verse a si misma,
Donde el dinero, el poseer, puede más.
En donde las riquezas se han vuelto el punto central de nuestro circulo vicioso,
Y donde solo un grupo de nuestra sociedad puede llegar a cumplir con esta condición.
Porque no por una vez el trabajo este en función de nosotros,
En cambio de que nosotros estemos en función de él.
O es que acaso queremos continuar destruyendo al planeta, contaminandolo con nuestra avaracia y envenenandolo con nuestro egoismo, ¿este es el mundo que queremos?.
Donde la televisión, los medios de masas, el computador, es el que nos domina.
Denigrantes, si, denigrantes e la verdadera palabra a lo que se puede llegar, donde los sueños simplemente son superficialidades, donde el creer ya no pasa por el ser sino por el tener.
Creiamos que la esclavitud había muerto, ya no existía, pero aunque no lo sepan aun existe, pero la verdad es que aun no terminamos con ella, Seguimos siendo supeditados por un sistema el cual no nos deja escapar, ser,
Hemos sido cegados, tapados, ridiculisados.
Cada vez mejor tecnología, pero aun no sabemos utilizarla.
Es tiempo de dejar de vivir por tener, por desear.
Es momento que volvamos a creer
a soñar, y a cumplir sueños.
Donde el grito de lucha sea, Creer!.