Cada año plantaba la misma semilla otoñal,
Una mirada para recordar.
Las hojas caían para dispersar,
La vida corría con un frío invernal.
La seriedad se plantó en sus ojos,
Con la esperanza de caer a la realidad.
Quizás encontrando un nuevo otoño,
O recogiendo un par de hojas para guardar.
La cebada no era un factor más,
Era el punto de inflección para la cosecha,
El material necesario para una sonrisa,
Pasajero oportuno del disfraz.
Cada segundo equivocado,
Seguramente distraído por el reloj equivocado.
El otoño confundido miraba hacia atrás,
Las sonrisas no querían avanzar.
Era la rutina otoñal,
Pero era un tiempo para cambiar,
No sabemos si por otra semilla,
Pero es lindo improvisar.
Era las hojas que había que limpiar,
Los escondites para poder verte.
La semillas de la próxima primavera,
Y dejar la anterior atrás.
Mientras el viento seguía siendo el color de la razón,
En este otoño que me mata,
Y aveces me habla de tu piel,
Un par de palabras manchadas.
Regálame una semilla de miradas,
Pétalos de palabras,
Un ramo de sonrisas,
Y una razón para mañana.
miércoles, 26 de marzo de 2014
miércoles, 12 de marzo de 2014
Espejos de Sal
Los espejos de sal,
Que retratan lo que menos puedes esperar,
La inmensidad de un rostro contento,
Las lágrimas saladas que caen y se pueden contar.
Huellas desvanecidas de viejos amigos,
Mientras las penas van quedando atrás.
Aquí las miradas no mienten,
Por eso se ocultan a cada tanto para no ser evidentes.
Nuevos conocidos como viejos amigos,
Las ironías del espejo,
Historias que no quisiera contar,
Palabras que desearon salir.
Era el cielo de los más ingenuos,
El paraíso para los más creyentes,
La Pachamama para otros,
La vida misma quizás.
Las nubes casi las podía tocar,
El horizonte no apareció jamás,
Agorafobia? ni hablar,
Sonrisas y risas para cautivar.
Era un viaje digno de un sueño,
O un sueño digno de viajar.
El sol aparecía a cada tanto,
Recordaba la lucidez de nuestro camino.
Y ahí estaba yo a manos abiertas,
Sin saber volar por las montañas,
Pero al parecer el camino era libre en los espejos de sal,
La vida es un espejo de sal, Salud.-
Que retratan lo que menos puedes esperar,
La inmensidad de un rostro contento,
Las lágrimas saladas que caen y se pueden contar.
Huellas desvanecidas de viejos amigos,
Mientras las penas van quedando atrás.
Aquí las miradas no mienten,
Por eso se ocultan a cada tanto para no ser evidentes.
Nuevos conocidos como viejos amigos,
Las ironías del espejo,
Historias que no quisiera contar,
Palabras que desearon salir.
Era el cielo de los más ingenuos,
El paraíso para los más creyentes,
La Pachamama para otros,
La vida misma quizás.
Las nubes casi las podía tocar,
El horizonte no apareció jamás,
Agorafobia? ni hablar,
Sonrisas y risas para cautivar.
Era un viaje digno de un sueño,
O un sueño digno de viajar.
El sol aparecía a cada tanto,
Recordaba la lucidez de nuestro camino.
Y ahí estaba yo a manos abiertas,
Sin saber volar por las montañas,
Pero al parecer el camino era libre en los espejos de sal,
La vida es un espejo de sal, Salud.-
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